Es necesario y fundamental mantener la institución de la inmunidad parlamentaria, a fin de dar todas las garantías a los congresistas en el ejercicio de su función, señaló el presidente del Tribunal Constitucional, Carlos Mesía. Sin embargo, hizo un llamado a los congresistas para reforzar los mecanismos de control institucional para que la inmunidad no se convierta en impunidad y tampoco se produzca el falso espíritu de cuerpo.
Estas precisiones las dio durante la ponencia que hizo durante el Foro “Pasado, presente y perspectivas de la inmunidad parlamentaria”, organizado por la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales del Congreso de la República.
Mesía recordó que la inmunidad alcanza no sólo a los congresistas sino a los ministros de Estado y al propio presidente de la República y tiene como objetivo evitar que estos se conviertan en denuncias y a su vez en persecuciones políticas, impidiendo el ejercicio cabal de su función.
“Por eso la necesidad de mantener la institución de la inmunidad, porque tanto el presidente como los ministros de Estado y congresistas necesitan todas las garantías para ejercer la función que se le ha encomendado”, puntualizó.
El presidente del TC insistió en que el Congreso debe preocuparse por buscar los mecanismos que eviten que la inmunidad sea sinónimo de impunidad y más bien planteó que una alternativa podría ser la renovación por tercios, que permitirá que los ciudadanos viendo la actuación de los congresistas decidan a mitad del periodo, quién no cumplió su función.
El foro se realizó en la Sala Grau del Congreso de la República y participaron la presidenta del Consejo de Ministros, Rosario Fernández; el congresista Javier Valle Riestra, el decano de la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Católica del Perú, Walter Albán y el Dr. Anibal Quiroga.
Lima, 10 de junio de 2011