Notas de prensa

Lima - abril 22, 2005

PRESIDENTE DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL ADVIERTE CIERTA RESPONSABILIDAD DOLOSA EN JUECES QUE DEMORAN SENTENCIAS

Lima, abril 21 (ANDINA).- Existe «cierto dolo» en algunos jueces que tardan más de 36 meses en emitir una sentencia, hecho que abre las puertas a la excarcelación de los procesados, advirtió el presidente del Tribunal Constitucional (TC), Javier Alva Orlandini.

«Tardar más de 36 meses en dictar un fallo revela cierto dolo, pero no necesariamente en todos los casos, debido a que la sobrecarga procesal impide a veces que se cumplen los plazos legales», declaró a la Agencia Andina.

Recordó que el Tribunal Constitucional dispuso, mediante un fallo, fijar en 36 meses como plazo máximo de detención judicial preventiva, lapso en el cual la instancia judicial debe dictar un sentencia.

«Pero si hay un expediente por más de tres años sin resolver, y lo tengo allí para que prospere la prescripción, evidentemente, se tiene malos resultados en la administración de justicia», comentó.

Señaló que existe un proyecto de ley en el Congreso para aplicar determinadas sanciones a aquellos jueces y fiscales que intencionalmente y con dolo demoren el trámite judicial.

Alva Orlandini reconoció que el presidente de la Corte Suprema, Walter Vásquez Vejarano, se encuentra empeñado en hacer más eficientes los procesos a los acusados por corrupción y otros delitos.

Subrayó que para ese objetivo el Poder Judicial requiere de los recursos económicos necesarios para proceder a la reforma del sistema judicial, pero señaló que eso no basta para lograr buenos resultados.

Precisó que, por ejemplo, el Tribunal Constitucional emite anualmente cerca de 5 mil sentencias, pese a no obtener mayores recursos del Ministerio de Economía y Finanzas.

Alva Orlandini dijo, de otro lado, que existe una «situación irregular» en el TC porque el Congreso aún no elige el reemplazo de Delia Revoredo, quien culminó su periodo el 8 de diciembre del 2004.

Lima, 22 de abril del 2005